La palabra en sí misma significa la desaceleración o pacificación de la mente, y samatha puede entenderse como la calma y la desaceleración de la mente y sus objetos mentales. El propósito de esta práctica de meditación es desarrollar una mente que descansa en la calma. Cuando desarrollamos la capacidad de descansar con tranquilidad, podemos sintonizar la experiencia con mayor claridad.Es una práctica fundamental que conduce a la atención plena, el discernimiento y la sabiduría.
La meditación trae concentración y gozo a la mente. La entrena para desarrollar la atención consciente y la clara comprensión de la realidad.. Al desarrollar nuestra capacidad de elegir en qué ponemos nuestra atención (respiración , objeto etc), instante a instante, nos deshacemos de la esclavitud de las obsesiones, impulsos compulsivos o pensamientos y distorsionadas de la realidad.

La meditación budista entrena a sus practicantes a realizar las tres características universales de la existencia, esto es, impermanencia, insatisfacción y el no yo, en cada momento.